El piso es cómodo, buenas condiciones en general y la terraza amplia con una agradabilísima vista al mar menor abierto, y efectivamente a un paso de los dos mares.
Aunque pone aparcamiento, nos encontramos con que no tenía, pero la dueña nos encontró un sitio en el garaje.
Rica estancia.
Nos gustó mucho la casa.
Esta en un sitio muy tranquilo y al lado de los dos mares en la parte más estrecha de La Manga.
Terraza grande. Colchones cómodos.
Equipada no falta un detalle. Wiffi.