Hemos estado comiendo 3 amigos y la experiencia no ha podido ser mejor. El local es un local sencillo, con todas las comodidades pero sin mucho encanto, está en un polígono.
Sin embargo cuando pruebas la comida parece que estás en el mismísimo Bulnes con vistas al Pico Urriellu.
Hemos tomado croquetas variadas, de chorizo con miel, de cecina y de chuletón. Muy ricas todas, para mi gusto las mejores las de cecina. También hemos tomado una ración de tomate preparado que estaba espectacular, un tomate riquísimo aliñado con un aceite de primera. No pudimos resistirnos a probar la fabada, y he de decir que espectacular. Las fabes estaban blanditas y suaves, muy muy rica. Si no fuera porque en Asturias te ponen la perola de fabada al lado, diríamos que estábamos allí.
El plato fuerte y por el que fuimos al asador fue un chuleton. Elegimos vaca de trabajo porque pensamos que tenía un precio razonable para lo que estábamos buscando. No nos equivocamos, una pieza de 1,7kg perfectamente madurada y preparada como mandan los cánones. Punto menos, perfectamente fileteada y con un sabor magnífico. De postre tomamos un tarta de queso también muy rica, tipo flan con base de galleta. Regamos la comida con sidra Trabanco.
El trato del personal inmejorable, la materia prima muy buena y muy cuidada la elaboración. Relación calidad precio muy buena, salimos a 55€ por persona. Un sitio muy recomendable, me quedé con ganas de probar los cachopos y el buey...no tardaré en volver.
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