Una casa preciosa decorada con mucho gusto, la tranquilidad y el silencio hacen que el sitio sea especial, las vistas son fascinantes se puede observar el monte y el mar al mismo instante, pero lo más asombroso el entorno y la puesta de sol con el monasterio que está situado encima del mar, un espectáculo. Sin duda repetiremos.

Bonito lugar, la casa muy bien y los dueños muy amables.
Tiene un difícil aceso en coche pero lo compensan las vistas.
En lo negativo los colchones de las camas pequeñas son muy incómodos.

Es un encanto de casa, decorada con mucho gusto y en un enclave espectacular. Sitio ideal para el descanso y el relax. Con un mirador hacia el mar precioso. Sin lugar a dudas sitio para volver.

Al llegar no sabes muy bien si es el lugar correcto. Para llegar a la casa hay que subir una cuesta enorme que la primera vez impone mucho.

La zona de La Cocina es independiente de la zona de las habitaciones, tiene un jardín con un porche muy chulo.

Dispone de barbacoa y un mirador con unas vistas espectaculares.

En la casa no falta de nada.

Totalmente recomendable.

Hemos estado 6 adultos y dos biños la tercera semana de agosto, la casa es estupenda, no falta de nada, y su situación es inmejorable, las vists espectaculares y las cenas en la terraza las hemos disfrutado muchísimo.ideal para desconectar.