Es la tercera vez que nos alojamos en estas villas y la experiencia, año tras año, es un placer.No sólo por la amabilidad y disposición del personal,que es inmejorable, si no también por las propias instalaciones.
Las villas tienen todo lo que uno puede necesitar para pasar unas vacaciones ideales y la situación es excelente, vistas al mar y lo suficientemente alejado para ir a Son Bou dando un agradable paseo y poder descansar por las noches alejado del bullicio.
Limpian las habitaciones todos los días y cambian cada dos las toallas y sábanas.
Además te facilitan sombrillas y esterillas si las necesitas para ir a la playa.
Hay un snack bar dentro de las instalaciones donde se puede comer con toda tranquilidad, aunque hay que tener en cuenta que la comida es casi toda congelada o precocinada.
En resumen un sitio totalmente recomendable para pasar unos días de relax y sentirte como en casa.