La verdad es que el sitio es precioso, desayunos de lujo frente al mar. Ideal para ir con niños, pescar y dar largos paseos por la playa. La casa está perfectamente equipada hay absolutamente de todo, las camas son cómodas y el sofá también. La vista desde el balcón es de cine. La dueña ha sido muy atenta con nosotros, muy disponible...la pena es que el puente durara tan poco.Pensamos repetir en verano.