La Fortuna de San Carlos constituye la esencia de una parte de Costa Rica, donde encontrarás un gran número de maravillas geológicas. A poca distancia, se alza el Arenal, uno de los volcanes más activos del planeta, que suele entrar en erupción y escupir ceniza y lava. También podrás visitar la catarata La Fortuna, una espectacular cascada que cae desde un acantilado de unos setenta metros de altura a la selva tropical. Las aguas termales proporcionan un remanso de paz en el que relajarse tras los espectáculos y las intensas actividades de tirolina, senderismo y rafting, o los paseos en caballo. Y como colofón, los refugios rurales de la zona son ideales después de un día de excursiones.