Estas alojado en el corazón del Barrio Húmedo, desde el salón y la cocina observaras la Iglesia de San Martín, Iglesia del siglo XI y reformada en los siglos XII y XVI Y que entre los tesoros conserva una 'Piedad' de Luis Salvador Carmona de 1750 y un grupo escultórico del estilo de Gregorio Fernández en el altar de la Virgen del Carmen, y varios pasos de las cofradías de Semana Santa. En la misma visual encontramos El Edificio Mirador o Consistorio, que destaca debido a su arquitectura de Barroco, con dos torres rectangulares terminadas en chapiteles y cuya fachada principal se encuentra en la Plaza Mayor. Si vienes en coche estacionarlo en el parkings de la Plaza Mayor, saliendo de él, encontraras tu suite a 10 segundos
La inigualable ubicación hace que puedas disfrutar en menos de 5 minutos del monumento top de la ciudad de León y no es otra que la majestuosa Catedral de León iniciada su construcción en el siglo XIII, es una de las grandes obras del estilo gótico, de influencia francesa. Conocida con el sobrenombre de Pulchra leonina, que significa 'la bella Leonesa' se encuentra en pleno Camino de Santiago y a 10 segundos la Plaza Mayor
En su estancia en este alojamiento exclusivo podrá vivir y sentir la historia de La Catedral de León que es conocida sobre todo por llevar al extremo la «desmaterialización» del arte gótico, es decir, la reducción de los muros a su mínima expresión para ser sustituidos por vitrales coloreados, constituyendo una de las mayores colecciones de vidrieras medievales del mundo.
Y como no La Plaza Mayor de León que ves las torres desde tu suite, albergo uno de los mercados más importantes que se instalaron en las afueras de la muralla de la ciudad en la época medieval, donde se vendían productos cultivados en el campo, pan y animales domésticos. También sirvió como lugar de ejecuciones públicas y de ruedo taurino. Como consecuencia de un terrible incendio sucedido en febrero de 1654, parte del mercado y algunas manzanas de caseríos quedaron destruidas, por lo que se planeó la construcción de una nueva plaza. Esta nueva plaza, que en esencia es la que se puede contemplar hoy, tiene un perímetro ligeramente trapezoidal, reflejo de los diseños del padre Antonio Ambrosio en su primera fase, y según planos de Francisco del Piñal en la segunda. La plaza se vio completa en el año 1677, 20 años después del incidente. En la actualidad presenta el aspecto de una típica plaza castellana similar a muchas que se reparten en otras ciudades españolas, pero con la diferencia de que es una de las mejores que se conservan, ya que durante su historia no ha sufrido alteraciones de importancia en su diseño original. En un tiempo se la llamó Plaza del Pan, por la cantidad de panaderías y hornos que se repartían en sus alrededores. Los edificios que la rodean se caracterizan por ser construcciones de dos plantas, con balcón corrido en la primera e individuales en la segunda. En las plantas bajas, y quizás el elemento más llamativo de la plaza, son los soportales arqueados, que dan cobijo a bares y pubs que te recomendamos visites.