Solo tengo tres palabras para describir el lugar. Impresionante, espectacular e Increible.
Impresionantes las vistas, el Duero, el barco, etc..
Espectacular, tanto el entorno como el trato en la Juderia de los arribes, la limpieza del lugar, el estado del hotel, etc..
Increible el trato recibido, nos hemos sentido como en familia.
Tanto Jorge, como su madre, como todos los demas, ha sido fantastico, sin duda repetiría y no me cansaré de recomendarlo a todos mis amigos y conocidos.
!!! Gracias por todo !!!