Muy agradable, bien equipado , amplio , el propietario muy atento . Todo superbien .Bien situado para conocer Cuenca y alrededores

El chalet la verdad es que es muy amplio y el jardín muy chulo. La piscina tb bien, pero supongo que es mejor en otras fechas. El agua estaba muy fría, pero es cosa del tiempo, claro está Lo peor es que la casa necesita un importante mantenimiento, la cocina está muy tocada, los muebles/cajones muy desvencijados, hay tres o cuatro descolgados. La limpieza dejó mucho, pero que mucho que desear. Las cosas sucias, los armarios con la ropa de cama y las toallas hechos una pena, los baños sucios y la cocina con la mayoría de la vajilla tan sucia que hubo que lavar todo antes de usarlo. Es verdad que el propietario, al día siguiente de llegar nos propuso que fuese de nuevo la persona encargada de la limpieza, pero ya habíamos arreglado nosotros todo lo de la cocina y no creíamos que, con todas las cosas por medio, se fuese a quedar mucho mejor. La excusa fue que no les dio tiempo, pero esa excusa ya se la he visto en varias reseñas en las que se quejan de lo mismo, además tampoco es que nos cruzásemos con la persona de la limpieza al llegar, podía haber estado limpiando hasta que llegásemos o incluso, quedarse hasta terminar y nosotros esperar. Hubiese sido mejor que lo que nos encontramos Para rematar, el primer día a las 7 de la mañana empezaron a soñar todos los radiadores, de nuevo por falta de mantenimiento. Se suponía que acaban de arreglar algo y no se dejaron las cosas como hubiese sido necesario. Los radiadores tenían mucho aire dentro, había habitaciones en las que no calentaban y en todas el sonido era inaguantable. Nos despertó a todos. Entiendo que después del arreglo, lo que había que haber hecho es purgar y comprobar que todo estaba correcto y no, que fuésemos nosotros los que hiciésemos de conejillos de indias. Las cosas bien hechas, bien acaban En resumen, una pena tenerlo así con las posibilidades que tiene si estuviese todo mejor mantenido

En el puente de diciembre un grupo de 12 amigos todos adultos (60 años aprox) pasamos unos días en la casa,lo primero que sufrimos fueron las camas algunas de 80 cm. con los colchones y somieres hundidos, uno de los dormitorios tiene chimenea abierta, es decir, no tiene puerta por lo que cuando bajan las temperaturas en el exterior a bajo cero, por el cañón de la chimenea entra frío gélido. Por otro lado un poquito de limpieza no le vendría mal, las puertas blancas de los baños tienen una corteza de mugre importante y de las paredes de algunos dormitorios mejor no hablar En honor a la verdad el salón es muy bueno, tiene sillones para todos y está bien. También es cierto que el dueño atendió al requerimiento, nos hicieron falta unas copas pues en la casa solo tenían 6 y éramos 12 y nos la llevo,cierto es que en lugar de ir y abrir con su llave tendría que haber ido cuando estábamos en casa. Con todas estas deficiencias el dueño de la casa no tiene problema alguno en pedir 300 euros de fianza Y claro a la hora de devolvernos el dinero le dijimos todo esto, el lo justifico diciendo que nos había dicho que algunas camas eran pequeñas,bien que fueran pequeñas pero las hay mejores en la basura.

La casa es amplia, muy agradable, con buena calefacción y jardín estupendo. Ideal para familias con niños.

Esta muy cerca de Cuenca, es un sito muy tranquilo. La casa es muy grande y el propietario es muy amable. Esta cerca de la circunvalación y desde allí había acceso fácil y rápido para poder desplazarse por la provincia. Un sitio para descansar y desconectar.

Estuvimos tres familias, 6 adultos y 6 niños y lo pasamos en grande. La casa es muy amplia y pudimos estar todos sin ningún tipo de molestia. La calefacción estupenda, no pasamos nada de frío. Acceso muy cómodo para hacer excursiones por la provincia.

Hemos estado toda la familia, con niños, abuelos... La casa está fenomenal, gigante, ideal para grupos grandes. El jardín enorme, piscina, pinpon, barbacoa... Muy recomendable.