La Cabaña del Abuelo es un alojamiento muy acogedor, con habitaciones muy bonitas y cómodas. Ideal para una escapada en familia como fue nuestro caso. Está situada en un lugar espectacular, rodeada de verdes montes con casas diseminadas, y muy cerca de Selaya, un pueblo donde cubrir cualquier necesidad.
El tiempo fue perfecto todo el fin de semana, permitiéndonos dar un paseo hasta la ermita de Valvanuz y visitar el parque de Cabarceno (visita obligada, es espectacular). Y por supuesto, hacer varias paradas para comprar productos típicos como los famosos sobaos pasiegos, la quesada, la mantequilla o diferentes quesos.
El trato de Ana, la dueña, fue inmejorable. Estuvo pendiente en todo momento, muy servicial y simpática. Y es de agradecer sus indicaciones y recomendaciones para hacer que nuestro fin de semana fuera lo mejor posible.
En definitiva, un sitio fantástico a donde volver, y por supuesto, un sitio muy recomendable que merece la pena conocer.