La casa es estupenda, limpia, con un jardín fantástico y muy bien ubicada. Raquel se preocupaba pq nuestra estancia resultase lo más agradable posible, nos recomendó playas y restaurantes. Sin duda volveremos

Un apartamento muy bonito y cómodo en un entorno precioso. Tiene de todo. La limpieza excelente. Tiene un jardín estupendo. Raquel es un encanto. Totalmente recomendable

La casa está muy bien situada, cerca de la autovía para desplazarte por igual hacia un lado como al otro de Asturias, no le falta nada, mucha limpieza y jardines muy bien cuidados, todo un placer para la vista. Es una maravilla despertar con la tranquilidad del verde campo asturiano. Y de Raquel, la anfitriona, que decir, una maravillosa persona que te hace sentir como en casa, culta y a la vez cariñosa.

Raquel es un encanto, la casa está fenomenal y además hay que dejarse guiar por sus recomendaciones tanto para hacer visitas a puertos, pueblos, playas... como para comer/cenar!! Sin duda volveremos.

No soy de poner opinones pero lo merece..Muy buena opción para pasar unos días. Un lugar precioso y un apartamento genial, con todas las comodidades. Y que decir de Raquel, nos ha tratado como si estuviéramos en nuestra propia casa. Volveremos

La ubicación es inmejorable, una casa con un jardín precioso rodeada de montañas y paisajes verdes, árboles frutales y flores. Por las mañanas uno se despierta con el cantar de los pájaros y es maravilloso. Los apartamentos impecables con todo lo necesario. Nuestro perro, Ronin, también lo pasó genial corriendo por el jardín, lo ha disfrutado muchísimo y fue tan bien recibido como nosotros. Raquel, la dueña es majísima, cuidadosa hasta el último detalle y muy preocupada porque la estancia sea lo mejor posible. En resumen: ubicación, trato y estado de los apartamentos maravillosa!! Y además los perros son muy bien recibidos!!! Desde luego que en cuanto podamos estaremos encantados de volver. =)

Es una preciosidad. Te sientes como en casa. El jardin ofrece un espacio perfecto para el descanso,los juegos de los niños... Y está cuidado con mimo como todos detalles. Raquel se ha ocupado de que nuestra estancia sea inolvidable. También está bien ubicada, cerca de varias playas y del aeropuerto. Repetiremos y la recomendamos totalmente.

Nos hemos quedado maravillados con esta casa. Es una casa preciosa con un jardín inmenso lleno de árboles frutales, hamacas, barbacoa, hortensias, palmeras, y metros y metros para disfrutar, leer un libro, charlar, tomarte algo... El apartamento tenía de todo, decorado con muy buen gusto, todo al detalle. La dueña, Raquel, es un amor de persona. Todo son facilidades y relax, que es lo que buscábamos. Fuimos con nuestra perra y también lo disfrutó muchísimo. Está es una ubicación excelente. En un valle precioso pero cerca e la autopista para ir a ver otros lugares como Luarca, Cudillero, el Valle de Paredes. Y muy cerca tiene unas playas espectaculares donde pudimos ir con nuestra perra. Si queréis sentiros como en vuestra propia casa asturiana, y disfrutar de la tierra, su gente, su flora y su gastronomía, os recomendamos alojaros en el Paraxo. Repetiremos seguro, mil gracias Raquel!

No creo que haya un sitio mejor. La casa es muy muy bonita, tiene un jardín cuidadísimo, con hortensias, manzanos, etc...muy asturiano todo. La barbacoa es una gloria para disfrutarla por las noches con amigos. Para mí es un punto y aparte en cuanto a viajar con perros. Siempre había tenido la sensación de que me dejaban ir con perro a los sitios, pero que en el fondo molestaba un poco. Aquí es todo lo contrario, Vega fue tan bien recibida como nosotros, han sido las mejores vacaciones de su vida. Pero lo mejor, con mucha diferencia, es el trato. Raquel, la dueña, es todo amor, cuida la casa con muchísimo cariño, y se deshace porque todo el mundo esté feliz y disfrute de sus vacaciones. No veo el momento de volver.