Estuvimos este puente de octubre en este piso de Valdepeñas, mi marido, yo y mis dos niños de casi dos años. El piso está en un lugar perfecto, rodeado de tiendas y cerca de la plaza principal, muy animada. La chica que nos atendió muy agradable.
Lo que menos me gustó es que no supimos encender la calefacción.
En general el piso, aunque tiene de todo, ganaría muchísimo con un cambio a muebles más modernos, una televisión mejor, una iluminación adecuada y una reforma en la cocina y baño, ....vamos, modernizarlo un poco.
Para los interesados, hay batidora eléctrica, plancha, estufa, ventilador, cafetera, toallas, ropa de cama, gel, champú y hasta pasta de dientes.
Un saludo a Emilia la propietaria, nos dio pena no poderla conocer.